Además de los propósitos principales de adorar a Dios, acercamos más a él, negarnos y humillarnos y crecer espiritualmente, es también apropiado tener propósitos secundarios para ayunar – suplicarle a Dios en oración a que nos ayude con una o varias necesidades graves, tanto a nosotros como a los demás.
Cuando Dios no haya contestado las oraciones respecto a ciertas necesidades, intente ayunar junto con la oración. En una ocasión, cuando sus discípulos no lograban expulsar a un demonio, Jesús les dijo ¨este genero no sale sino con oración y ayuno¨ (Mateo 17:14-21). El ayuno apropiado generalmente produce resultados significativos. Aunque confiamos en las herramientas espirituales de la oración, el estudio bíblico y la meditación a diario, ocasionalmente necesitamos la poderosa herramienta del ayuno.
Puede haber muchas razones para ayunar tales como un problema personal, un pecado difícil de superar, tener que enfrentar una importante decisión, una crisis de la iglesia, la amenaza de algún peligro. La necesidad de cambiar la actitud de alguien o expresar agradecimiento, entre otras cosas. Para un estudio muy esclarecedor, utilice una concordancia bíblica y busque todos los pasajes, que contengan la palabra ayuno, ayunó o ayunando. Lea acerca de porque la gente ayunaba y pedía en oración, y lo que Dios hizo como resultado del ayuno.
Sin embargo, nunca deberíamos considerar el ayuno como una forma de presionar a Dios para obtener lo que deseamos (Isaías 58:3). Dios desea que oremos acerca de nuestro problema, pero sin tratar de dictarle soluciones. Nuestras actitudes deben de ser como las de Jesucristo cuando oro ¨pero no se haga mi voluntad sino la tuya¨ (Lucas 22:42). En adecuado que un grupo, tal como la congregación de la iglesia o un círculo de amigos, decidan ayunar juntos por asunto de urgencia.
Cuando su país fue invadido, el rey Josafat ¨hizo pregonar ayuno a todo Juda¨ (2da Crónicas 20:1-3). Después de que Jonás predico, ¨los hombres de Nínive creyeron a Dios, y proclamaron ayuno¨ (Jonás 3:5). A objeto de suplicarle a Dios que los protegiera. Esdras proclamo un ayuno para todos los exiliados que regresaban a Juda (Esdras 8:21-23). Ester les pidió a todos los judíos de la capital persa que ayunaran para escapar del genocidio (Ester 4:16). Isaías 58:1-12 es un pasaje profundo que contrasta las actividades correctas y equivocadas del ayuno. Muestra claramente que ayunar no debe ser simplemente un mero ritual.
¿Por qué?, Porque necesitamos ayunar con oración para ayudarnos a mantener una relación cercana con Dios el Padre y Jesucristo. Y, como veremos, hay otros beneficios espirituales del ayuno.Cuando Jesús les hablo a sus discípulos acerca de como debían ayunar, el claramente esperaba que lo hicieran (Mateo 6:16-18). No dijo, ¨si ayunan¨ sino ¨ cuando ayunen¨.
Y note que en este capítulo Jesús enfatiza el ayuno tanto como la oración y el hacer buenas obras. El ayuno es mencionado prominentemente en el Antiguo y el Nuevo Testamento. El registro bíblico de quien ayuno es un ¨quien es quien¨ virtual de la Biblia e incluye a Moisés, David, Elías, Esdras, Nehemías, Ester, Daniel, Ana y Jesucristo. El apóstol Pablo llevo a cabo ¨muchos ayunos¨ (2do Corintios 11:27).